Comedor para niños
Bogotá, Stefanie Mühlemann – A intervalos de 4 a 7 semanas, los martes, vamos a almorzar juntos. Este está en una zona pobre de la ciudad. Entre 100 – 200 niños (edad aprox. 1 – 13 años) vienen a comer en un lapso de 1 hora. Hay tres platos: sopa, plato principal y jugo de frutas. Si no se come la sopa, no obtendrán el plato principal y lo mismo con el jugo de frutas. Dado que esta es la única comida del día para la mayoría de los niños, las reglas son muy estrictas.
Me permitieron estar allí dos veces y fue una experiencia impresionante. La primera vez, mi español no era lo suficientemente bueno para tener una conversación buena y fluida con los niños. Sin embargo, esto no fue una desventaja. Los niños y niñas están muy interesados en aprender palabras en otros idiomas. También son particularmente buenos para comunicarse con gestos y expresiones faciales. Por ejemplo, los niños preguntan si sería posible levantarlos para que puedan tocar el techo. Sus casas a menudo se construyen muy profundos, por lo que este es un gran evento para ellos. También están increíblemente emocionados con nuestra visita cada vez y ya saben qué preguntas nos quieren hacer: “¿De qué país eres?”, “¿Cuánto tiempo llevas aquí?”, “¿Hablas bien español?”, etc.
A principios de marzo de 2016 estuve allí por primera vez. La segunda vez fue a fines de abril de 2016. Fue muy conmovedor que algunos de los niños me reconocieran. Sonrieron por todas sus caras y me saludaron. Discutimos varias cosas con jóvenes y mayores y al mismo tiempo les servíamos la comida. Tan pronto como han comido, la mayoría sale a jugar a la calle o casa.
Este martes recibieron zapatos nuevos para la escuela. Se llenaron de alegría y nos obsequiaron con los brillantes zapatos blancos. Sin embargo, esto no fue fácil: Los niños y niñas tuvieron que tener paciencia, porque solo una mujer distribuyó los zapatos y esto tomó mucho tiempo.
Normalmente existe la posibilidad de comer allí como un grupo de voluntarios. Eso sí, sólo cuando puedas asegurarte de que todos los niños han comido. Luego el profesor de Nueva Lengua nos lleva a la azotea y desde allí se puede ver sobre el asentamiento y tener una vista de una pequeña parte de la ciudad de Bogotá.
¡Impresionante!
Este articulo originalmente fue escrito en Alemán
Todos los artículos de este blog han sido escritos por los profesores de nuestra escuela y por estudiantes de diferentes países que viajaron a Colombia para aprender español.
“ Viaja tu también y estudia español en NUEVA LENGUA“
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