Al momento de tomar la decisión de aventurarnos a visitar otro país nos llenamos de curiosidad y muchísimas expectativas por querer explorar y conocer todo lo que nos pueda ofrecer nuestro nuevo lugar de destino.
En los últimos años, Colombia se ha convertido en un país muy visitado por su gran diversidad de paisajes, sus montañas que adornan lo hermoso de sus valles, sus lindos mares que bordean sus costas, su inmensa selva abundante en flora y fauna, su riquísima variedad de comidas, pero hay algo que también atrae mucho a los visitantes, la calidez y amabilidad de su gente.
Es éste el caso de Dominic, un chico suizo que vino a nuestro país con la intención de aprender español en un lugar cerca al mar. Por esta razón eligió a la escuela Nueva Lengua en la ciudad de Cartagena para realizar su sueño. Sin embargo, lo que nunca imaginó fue que “La Fantástica” (como muchos llaman a esta hermosa ciudad), lo haría convertir en un “costeño”, como llaman a las personas que viven en la costa caribe de Colombia.
Desde su llegada a Cartagena, Dominic se dio cuenta de la cultura caribeña típica de la ciudad y siempre se interesó por ser parte de ella: conoció “Las palenqueras”, mujeres con descendencia africana que caminan con sus frutas frescas por el centro histórico de la ciudad, las casas coloridas que le dan vida a sus calles, la brisa con olor a mar y la comida típica de la ciudad: el arroz de coco con Patacón y pescado frito.
Todo esto incentivó a Dominic a integrarse a la cultura local, lo cual pudo ayudarlo a familiarizarse con las expresiones locales. Tanto así, que cuando llegaba a la escuela saludaba a sus compañeros de clase y profesores con frases como: “Mi vale, ¿cómo la vaina?”, “¿Compa qué?”, “Estoy llevao” y un acento “costeño” que cada día fue mejorando gracias a su interacción con locales y su familia de acogida que todo el tiempo le ayudaban a seguir practicando.
Cada vez que caminaba por las playas de la ciudad, él veía como “Las palenqueras” hacían un peinado de cabello muy particular a los turistas con sus habilidosas manos: Las Trenzas. Esto le causó mucha curiosidad y resolvió hacerlo también.
Dominic no sabía que Cynthia, una de las profesoras de la escuela tenía la habilidad de hacer muy bien Las Trenzas, así que una vez él manifestó sus ganas de cambiar su look, ella se ofreció a realizar este trabajo.
Cuando aprendemos un idioma, también nos acercamos a una nueva cultura, y esto fue algo que este chico, nacido en Berna hizo muy bien. La Champeta, música típica de Cartagena con orígenes africanos, fue otro de los aspectos con los que él más se identificó y aprendió a bailar durante las clases de baile que se ofrecen en la escuela.
Después haber estado por 5 meses en la escuela y en la ciudad de Cartagena, no hay duda que esta experiencia le cambió la vida a Dominic, quien ahora es un “costeño” más en nuestra ciudad.
Y tú, ¿qué esperas para vivir una experiencia como esta?
Si quieres recibir información, escríbenos a contactenos@nuevalengua.com y pronto recibirás una respuesta.
Alberto Morillo – Profesor de español
Todos los artículos de este blog han sido escritos por los profesores de nuestra escuela y por estudiantes de diferentes países que viajaron a Colombia para aprender español.
“ Viaja tu también y estudia español en NUEVA LENGUA“
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